RSS SyndicationTwitterFacebook
Rechercher

LOS TENTACULOS MILITARES YANKEE

Washington ha instrumentado un despliegue global de bases castrenses que le permite afrontar distintas contingencias.

Fuentes de inteligencia estadunidenses y sudamericanas habà­an confirmado, antes de la llegada al poder del presidente Fernando Lugo, la presencia de efectivos militares de Estados Unidos en Paraguay, como primer contingente para el establecimiento de una base militar.

Ese movimiento de tropas tenà­a el propósito aparente de llevar a cabo ejercicios conjuntos e intercambios entre las fuerzas armadas. La base quedarà­a ubicada en Mariscal Estigarribia, lugar en el cual históricamente el ejército paraguayo ha mantenido un comando de división y considerables efectivos, como asentamiento de soberanà­a en el Chaco.

Por su situación geográfica, se vinculaba ese despliegue a una probable intención estadunidense de controlar los recursos naturales de la región, como el petróleo y el gas bolivianos, los acuà­feros paraguayos y el tráfico en la Triple Frontera.

Teniendo en cuenta la endémica inestabilidad polà­tica y social de Bolivia, el escaso control fronterizo de los paà­ses en esa zona, el contrabando asociado al narcotráfico, con la complicidad o pasividad de las autoridades de los gobiernos respectivos (Argentina, Brasil y Paraguay) y con un marco de pobreza y marginalidad ; lo más probable es que tales actividades se habrà­an de incrementar en el mediano plazo y por lo tanto influirà­an en la estabilidad regional.

Si se incluà­a en el escenario la presencia permanente, temporal o en tránsito de comandos terroristas, era lógico que Washington decidiera adoptar medidas para asegurar un futuro controlable. En 2003, el supremo comandante militar aliado en Europa (OTAN), general James Jones, actual asesor de seguridad nacional del presidente Barack Obama, dijo que "existen grandes zonas no gobernadas, que son potenciales santuarios para los terroristas del mundo y para los futuros mercaderes de todo tipo de elementos, a los que tratamos de combatir".

Esta reflexión no se circunscribà­a únicamente al escenario europeo ni al terrorismo islámico ni a los narcotraficantes, sino que resultaba mucho más amplia. Jones agregó : "Tenemos la oportunidad de establecer una presencia estratégica, de ser necesario una presencia operacional, mucho más rápido que lo hayamos hecho antes. Por lo tanto, razonablemente se espera que analicemos los emplazamientos de bases para asegurarnos que haremos las cosas bien en el futuro".

Éste ha sido y sigue siendo el perfil de una visión geoestratégica militar diseñada en Washington y con proyección hasta 2020, por lo menos. Estados Unidos posee comandos conjuntos (unificados, conforme a su terminologà­a militar), los cuales dependen directamente del Presidente, con responsabilidad jurisdiccional en todo el planeta e incluso en el espacio exterior.

Se trata del Comando Central, para conducir las operaciones ofensivas de contingencia en cualquier parte del mundo (actualmente sus fuerzas operan en Irak y Afganistán) ; el Comando Europeo, cuya extensión se describe por sà­ sola y se vincula con la OTAN ; el Comando del Pacà­fico, que incluye a todo ese océano, sus islas y el Lejano Oriente ; el Comando Sur, con responsabilidad desde el rà­o Bravo hasta la Antártica, incluido el Caribe ; el recientemente creado Comando de à frica.

También, el Comando de las Fuerzas Especiales ; el Comando de Administración del Tráfico Militar, responsable de todos los medios de transporte aéreos, navales y terrestres ; el Comando del Espacio, con jurisdicción en el espacio exterior, incluidos los medios de defensa estratégica ; y el Comando Norte, con una misión estratégica defensiva del territorio de Estados Unidos y la inclusión de Canadá y México bajo un mando militar unificado.

Washington ha instrumentado un despliegue global de bases militares, aéreas y navales que le permite afrontar distintas contingencias, conforme a los tiempos reales y los espacios estratégicos.

Las últimas dos décadas se han caracterizado por la adopción de un modelo de intervención global inmediata. Continuaré con el tema.

http://www.excelsior.com.mx/index.php?m=nota&id_nota=658970

URL de cet article 11465
   
Même Thème
L’horreur impériale. Les États-Unis et l’hégémonie mondiale
Michael PARENTI
Enfin traduit en français. Notes de lecture, par Patrick Gillard. La critique de l’impérialisme made in USA La critique de l’impérialisme américain a le vent en poupe, notamment en Europe. Pour preuve, il suffit d’ouvrir Le Monde diplomatique de novembre 2004. Sans même évoquer les résultats des élections américaines, dont les analyses paraîtront en décembre, le mensuel de référence francophone en matière d’actualité internationale ne consacre pas moins de deux articles à cette (…)
Agrandir | voir bibliographie

 

Je ne sais pas ce qu’est un homme, je ne connais que son prix.

Bertolt Brecht

© Copy Left Le Grand Soir - Diffusion autorisée et même encouragée. Merci de mentionner les sources.
L'opinion des auteurs que nous publions ne reflète pas nécessairement celle du Grand Soir

Contacts | Qui sommes-nous ? | Administrateurs : Viktor Dedaj | Maxime Vivas | Bernard Gensane
Le saviez-vous ? Le Grand Soir a vu le jour en 2002.